lunes, 15 de junio de 2015

EN ROJO... DANZA DE ALAS DE LIBELULAS.

EN ROJO... DANZA DE ALAS DE LIBELULAS.

y con eso me conformo, con que vengas a mi ,rauda, pero...¡ trae tu boca¡...si , esa que trae alas en rosa, la que encierra eso tan tentandor, esa madura fresa sabrosa que agolpa borbotones en sangre, y en su periódico contacto con mi soledad salada, cuando dibuja ese habitar de besos, embriaga la ceniza de mi noche con su color de vino en tinto ...y en ese jugar, se me antoja como esa mariposa en color pasión, orbitando en mi cueva de granada y marfil...y ahí, mejorando el flujo sanguineo, generas llamaradas de cálidos colores y consumes aquella sal que desagradaba,  la duermes con el rojo rumor de la pleamar que creas y me arropas con la recreacion forjada de un mar de espumas...¡todo en rojo¡... me impregnas con el dulzor de la granadina y siembras cosquillas con el volar de cien caballitos del diablo...¡¡¡que dulce y rojo infierno¡¡¡ ...cuanta tentacion la que alberga ese ático del pecado, esa terraza solo enfriada por el dormir que alberga en su espera tu boca, a veces   inocente...¡Que jugoso manjar, donde se alea inocencia y pecado¡ ...donde se producen esos relampagos que me atropellan, donde se separa la verdad de la mentira , donde se funde el calor de la noche con el frescor de tu sonrisa, que es el despertar del dia...hasta que en otra ocasión, siempre soñada. desborde mi espera y logre descubrir lo que tu lengua oculta, los mejores licores en rojo, la denominacion de origen se que está en tu boca...y mientras, en nieve, soñare tu risa, en ese callar , en ese cerrar de ojos, pero en vigilia eterna ,  ese momento de paz que se produce mientras me hablas, y esos susurros en mi emanan  como el correr sinuoso de un rio...y por fin esos colores calidos dan respiros , y la razon viene , y las cosas se llaman por su nombre, y aprendo de nuevo a respirar , con mi alma desnuda, abandono tu boca por momentos, ese volcan de mezcla de ceniza y lava roja y me relajo centrándome en tu mirada, esa geométria que me hipnotiza y apacigua el ritmo de mi sangre y entre la espesa miel, me transportas a la ataraxia, con ese convencimiento que en las lagunas que te habitan, se destila la loca armonia de hondos cantos de sirenas...

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