jueves, 29 de octubre de 2015

MI TEATRO ROMANO...





                                                      MI TEATRO ROMANO...


Recuerdo un dia enseñando a unos amigos ''forasteros'' el Teatro Romano , mirando unas columnas milenarias de orden Corintio, a la vez que les explicaba las diferentes caveas que terminaban en la escena, me fije en una romántica pareja que paseaba de la mano contemplando los restos de lo que antaño fue una impresionante escena teatral y donde, supongo, los moradores también se habrían deleitado disfrutando de aquel momento...

Y mientras mi charla no paraba , fuera de cualquier orden jonico o corintio, la pareja se divertía a su rollo , ella iba bien agarrada, fortificada a su gladiador de armadura en pecho y parecia mirar la cornisa donde anidaban las palomas mas que contemplar en su imaginación cualquier tipo de historia clasica al estilo de la opera Herodiade

Mi mirada hacia la izquierda fue oportuna, no llegó tarde un segundo , pues fuera de la explicación de lo que era la Orchestra, se desvio de nuevo a la pareja y observe como ella se separó de él unos instantes y mientras se alejaba, con la misma delicadeza de quien se aparta suavemente el flequillo de la cara, introdujo su mano bajo la falda y con su dedo índice y un suave y elegante movimiento de caderas, fue sacando de entre sus nalgas la tira del tanga que, supuse, entre subida y bajada por tanta grada, se le había descolocado.
Todo fue simple y natural, sin pudor ni intento de provocación, de tal manera que en un instante se acercó a su joven gladiador, le tomó la mano y volvió a apoyar la cabeza en su hombro mientras se perdían por el extremo izquierdo del gladerio de la Cavea Media.

Se me fue de la cabeza por momentos la Roma Imperial y pense en esa ropa interior que llevan las mujeres, y algunos hombres, que se utilizan en momentos poco apropiados por incomodos y que parecen estar fabricados con la firme intención de meterse donde no deben... eso es inevitable, pero lo que marca la diferencia es cómo se actúa en público ante la necesidad de eliminar la molestia sin parecer un tanto ordinari@ o simplemente por grotesc@ y descuidad@ un o una animalota de cuatro patas ... supongo que hay que ser sutil, elegante...y esta chica lo tuvo bien claro...esta es mas bien de esas de ...si te molesta... con naturalidad y elegancia, coño,¡ tira de ahí sin miedo¡¡¡

Estaba mas que claro, eso era un tanga. Eso no era una braga. Eso es un engendro que se le ocurrió a alguien – seguramente – un tío que estaba aburrido una tarde de lluvia.y es que si los romanos levantaran la cabeza y pasara por delante esa imagen,.. Eso ni tapa ni tiene pretensiones de hacerlo... y es que por pequeña es una prenda compleja por que, si no tienes un culo brasileño de esos que más que quitar el hipo provocan ataques de corazón o eres Irina Shayk...no es tan fácil su porte...

Yo nunca me he puesto un tanga, pero claro, como cualquier cristiano los he visto y hasta mordido en alguna ocasión y no hay que ser un lumbreras para apreciar que eso está diseñado para tapar poco y molestar mucho. El triángulo delantero requiere de una depilación de diseño para que quede digno y el hilo trasero se pierde entre esas dos montañas que son tus nalgas y nunca más se vuelve a saber de él...

El tanga, es como el bañador olimpico en los hombres, deja todas tus flaquezas expuestas y muchas veces amiga mía, lejos de lo que se pretende, no acaba siendo sexy, porque o lo que enseñas es primera división o si juegas en regional, tu slogan es aquel de “mejor insinuar que enseñar”... por eso yo no me pongo tanga...ni bañador olimpico ya¡...eso lo dejo para mi hijo¡

Hombre, por buscar una justificación, la única defensa que tiene es la de pasar desapercibido cuando llevas pantalones ajustados o insinuar el triangulo isosceles ese que nos provoca tanto, antesala por el haz del triangulo invertido que imaginamos con morbillo.Ese santo Grial , esa copa invertida... aunque a veces casi mejor replantearse las compras de pantalones que clavarse esa cuerda traicionera en las caderas y en donde la espalda pierde su nombre...Mejor regalarlas a los sobrinillos para que se hagan unos tirachinas y se vayan al Albarregas a cazar ranas.

Y sin braga , ni tanga, sin nada, esa chica no hubiese tenido ese morboso gesto, asi que si todo lo anterior aburre, pues nada, a prescindir de la ropa interior, que por lo visto es lo que más tirón tiene, en el siglo XXI que es donde estamos aunque visitemos el Teatro Romano... y sino a las pruebas me remito, están las Jennifer López de turno llevando vestidos imposibles y claramente sin nada bajo esa tela...Ahi si que hay para flipar...

Tambien me imagino a esa chica sentandose en una piedra a cincuenta grados centígrados en la cavea IMMA, sin nada debajo, seguro haría otros movimientos menos ortodoxos aun...si, tiene que ser incomodísimo ir por la vida rozando tus partes a cada rato y con las posaderas sin protección...y es que debe ser la fuerza de la costumbre, pero imagino que os costara imaginar ir al lavabo eliminando la acción de subirse las bragas o el tanga o lo que dios o el diablo quiera...pero algo¡¡¡¡... No sé, no se para que voy al Teatro Romano, si yo me lo conozco todo demasiado bien, se me va la mente por ello a otros lugares, me distraigo... pero... centrandome, aunque me parece morboso, a la vez y siendo serio , me parece una incomodidad ir sin ropa interior...mejor para eso el tanga que abriga muchiiiisimo¡¡¡

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